Varicocele

Definimos el varicocele como la existencia de dilataciones
varicosas en la zona del escroto y es uno de los hallazgos más frecuentes en el
varón que consulta por esterilidad.

Estas dilataciones, más frecuentes en el lado izquierdo por
la disposición anatómica de los vasos de retorno hacia el abdomen, pueden
acompañarse de molestias y dolor hasta en el 10% de los pacientes.

Se sabe que la presencia del varicocele se asocia a una
disminución del volumen testicular, con alteraciones en los valores del
espermiograma, tanto en concentración espermática como en movilidad y
morfología de los espermatozoides. Puede incluso llegar a producir la ausencia
completa de espermatozoides en el eyaculado.

La razón por la que se producen estas alteraciones tan llamativas
es el aumento de la temperatura a nivel escrotal y testicular. Este incremento
de temperatura afecta a la función de las enzimas que controlan la síntesis de
ADN espermático, aumentando la fragmentación del mismo,  y aumenta la función metabólica celular con
disminución del glucógeno intracelular y provocando daño celular. Se sabe
además que puede afectar a la capacidad de los espermatozoides para que se
produzca una reacción acrosómica óptima, lo cual va a disminuir la capacidad de
estos espermatozoides para interactuar con los ovocitos.

La temperatura óptima para que estas funciones se produzcan
con normalidad está alrededor de los 33º y se inhibe a mayores temperaturas,
como en los pacientes con varicocele, en los que la temperatura testicular oscila
entre los 22.5 y los 35ºC. Este aumento de la temperatura se produce en ambos
testículos aunque el varicocele afecte a uno solo.

El diagnóstico de esta patología se realiza mediante la
exploración física y la ecografía con Doppler color.

Respecto al tratamiento, todos los especialistas coinciden
en que debe ser corregido cuando el varicocele provoque dolor en el testículo
afectado. Respecto a la cirugía para mejorar la fertilidad, la indicación es controvertida
desde el punto de vista de la medicina de la reproducción.

Aunque sabemos que la corrección del varicocele mejora los
parámetros seminales, con la posibilidad que ello conlleva de que se produzcan
embarazos espontáneos, éstos, de producirse, ocurren en un intervalo de tiempo
no inferior a seis meses y, cuando nos encontramos con parejas en las que la
edad de la mujer es igual o superior a los 35 años, éste es el periodo que debe
considerarse límite para recomendar un tratamiento de reproducción asistida por
el efecto pernicioso que la edad tiene sobre las posibilidades de gestación.

Así pues, la indicación de la cirugía debe evaluarse muy
estrictamente cuando el criterio que prima es el de conseguir un embarazo ya
que, aunque pueden mejorarse las características seminales, sabemos que el
consumo de sustancias antioxidantes, combinadas con técnicas de reproducción
asistida con microinyección espermática es altamente eficaz en la consecución
de una gestación.